Después de la rebelión fallida del fin de semana pasado en Rusia, se desconoce el destino de algunos de los principales generales.

(Foto archivo, el coronel general sergei Surovikin )

El presidente de Rusia logró exiliar al jefe mercenario de Wagner, Yevgeny Prigozhin, quien lideró un breve motín la semana pasada, pero el destino de varios generales importantes aún no está claro.

Hubo informes no confirmados de que uno de ellos con vínculos con Prigozhin fue arrestado y otro estuvo misteriosamente ausente de varios eventos a los que asistió el presidente Vladimir Putin y el asediado ministro de Defensa, Sergei Shoigu.

El mundo opaco de la política del Kremlin ha llevado a una intensa especulación de que algunos oficiales militares de alto rango pueden haberse confabulado con Prigozhin y ahora pueden enfrentar un castigo por el motín que envió brevemente una marcha prácticamente indiscutible hacia Moscú que Putin ha calificado de traición y una «puñalada por atrás.

La especulación se centró en el general Sergei Surovikin, quien tiene vínculos desde hace mucho tiempo con Prigozhin y no ha sido visto desde el comienzo de la rebelión cuando publicó un video instando a ponerle fin.

Un bloguero militar ruso, el Moscow Times y el Financial Times informaron que Surovikin, quien también es el comandante de la fuerza aérea rusa, ha sido arrestado.

Alexei Venediktov, exjefe de Ekho Moskvy, una destacada estación de radio independiente que fue clausurada por las autoridades después de que Moscú invadiera Ucrania, dijo que Surovikin y sus lugartenientes cercanos no han estado en contacto con sus familias durante tres días, pero no llegó a decir que fue detenido.

Otro importante canal de mensajes militares, Rybar, dirigido por un ex oficial de prensa del Ministerio de Defensa, informó que se estaba llevando a cabo una purga en las filas mientras las autoridades investigaban las denuncias de que algunos podrían haberse puesto del lado de Prigozhin.

Surovikin ha estado vinculado a Prigozhin desde que ambos estaban activos en Siria, donde Rusia ha emprendido una acción militar desde 2015 para apuntalar al gobierno del presidente sirio Bashar Assad y ayudarlo a recuperar territorio después de una devastadora guerra civil.

Si bien Prigozhin había desatado insultos llenos de palabrotas contra Shoigu y el jefe del Estado Mayor General, el general Valery Gerasimov, antes del motín de la semana pasada en el que exigió su destitución, ha elogiado continuamente a Surovikin. Sin embargo, cuando comenzó la rebelión, Surovikin grabó un video instando a detener el motín

A principios de esta semana, The New York Times informó que los funcionarios estadounidenses creían que Surovikin tenía conocimiento previo sobre el motín. Cuando se le preguntó sobre ese informe, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, se encogió de hombros como parte de “especulaciones y chismes”.

El jueves, Peskov se negó a comentar si Surovikin había sido arrestado.

Cuando The Associated Press le preguntó si el presidente todavía confía en Surovikin, respondió que Putin trabaja con el ministro de Defensa y el jefe del Estado Mayor General y remitió las preguntas sobre los oficiales al Ministerio de Defensa. También remitió todas las demás preguntas sobre Surovikin y su estado al ministerio.

Sobre si Putin considera necesario destituir a los militares que habían tenido vínculos con Prigozhin, Peskov dijo que “el tema no es mi prerrogativa y no tengo nada que decir al respecto”.

Surovikin, calvo y de aspecto feroz, apodado «General Armagedón» por los medios occidentales por sus tácticas brutales en Siria y Ucrania, fue acreditado por apuntalar las defensas rusas después de la retirada de Moscú de amplias áreas del territorio ucraniano el otoño pasado en medio de una rápida contraofensiva de Rusia. Kiev.

Nombrado por Putin en el otoño para liderar las fuerzas rusas en Ucrania, Surovikin presidió la campaña de bombardeos que tuvo como objetivo las plantas de energía de Ucrania y otra infraestructura vital, pero no logró interrumpir el suministro de energía.

En enero, Putin lo reemplazó con Gerasimov, poniendo al jefe del Estado Mayor a cargo de la batalla rusa en Ucrania. Surovikin fue degradado al puesto de adjunto de Gerasimov.

El propio destino de Gerasimov tampoco está claro después del motín fallido. Si bien Shoigu se presentó en varios eventos a los que asistió Putin, Gerasimov estuvo misteriosamente ausente.

Si de hecho se está llevando a cabo una purga, podría desestabilizar la cadena de mando militar y erosionar la moral de las tropas en medio de la etapa inicial de la última contraofensiva de Ucrania y ofrecer a Kiev la oportunidad de recuperar más terreno. (Fu

(Fuente prensa asociada)

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